Se denomina prótesis dental a cualquier elemento artificial que sustituya un diente perdido o muy deteriorado para restablecer la estética y función perdida. Con la prótesis dental sustituimos piezas perdidas en la boca o bien dientes que tenemos en muy mal estado mediante distintos procedimientos.

Las prótesis dentales pueden ir sujetas sobre dientes naturales o sobre implantes, por lo que disponemos de dos tipos: Prótesis Fija y Prótesis Removible.

1. Prótesis removible (El paciente puede quitarse la prótesis):

– Prótesis parcial removible: aparato que sustituye uno o más dientes, sujeto a los dientes que el paciente aún tiene en la boca por medio de ganchos metálicos o estéticos.
– Prótesis completa: paciente edéntulo total (sin ningún diente) de una arcada o de ambas. La sujeción de la prótesis se produce por la succión de los tejidos blandos (por la adaptación de esa prótesis con las encías).
– Férula de descarga: dispositivo que protege los dientes, musculatura y articulación de la mandíbula, indicado en casos de Bruxismo.
– Sobredentadura: aparato que va sujeto por medio de diferentes aditamentos o elementos de sujeción a implantes o a dientes.
– Prótesis Mixta: se compone de una parte fija y una parte removible combinada.

2. Prótesis fija (no pueden ser retiradas por el paciente):

– Corona / funda: se colocan sobre dientes deteriorados o sobre un implante.
– Puente: sustituyen uno o varios dientes contiguos cuando tenemos un espacio sin diente y utilizamos los dientes o implantes de los extremos de ese espacio para apoyarnos.
– Prótesis Híbrida: sujeta a varios implantes, sustituyen las piezas dentales y parte de la encía. A diferencia de las prótesis removibles, éstas no presentan paladar.
– Rehabilitación fija total sobre implantes o dientes: similar a la prótesis híbrida pero más reducida en tamaño y aparentemente más natural, pudiendo sujetarse a implantes o a dientes.